-Lo fue. Y lo es.- Las Naves saben ser así de sarcásticas cuando quieren. -Hemos hecho todas las pruebas, los animales y los relojes que han sido enviados al otro lado han vuelto y todo fue instantáneo. Así que aquí no puede estar pasando nada diferente.-
-Mira, yo puedo ser un simple chófer en esta nave, pero me necesitas cuanto yo te necesito a ti, y te puedo asegurar que sé lo que ‘ocurre’ cuando sucede.-
-No, no es este el caso. Esto no se puede definir técnicamente ‘sucediendo’. Lo estamos viviendo, sin duda, pero el tiempo no pasa en realidad. Estamos viviendo el paso por el espacio como si el tiempo estuviera pasando.-
-Está bien, tú eres la Nave sabelotodo, entonces si eres tan inteligente, ¿durante cuánto tiempo va a estar pasando esto?-
-Durante unos trescientos setenta años luz.-
-Esta es una medida de espacio, no de tiempo.-
-Efectivamente.-
Las Naves no responden siempre con sencillez a preguntas sencillas, especialmente cuando hay tensión entre ellas y su piloto. -¿Cuánto tiempo llevará? Sigo sin ver la tierra como si no hubiéramos dejado la órbita y me parece que haya pasado un mes ya.-
-Cada distancia de Planck requiere un tiempo de Planck-.
-Es decir, vamos a estar aquí para siempre, ¿verdad?-
-Más o menos.-
-Pero yo estoy viendo cosas-
-Estas ‘cosas’ como las llamas no son nada más que alucinaciones; de esta manera se manifiesta la incomodidad del ser humano delante de lo desconocido, una incomodidad que le lleva a crear figuras familiares para aceptar una realidad a la que no se conforma y al mismo tiempo no puede cambiar. Tus percepciones están influyendo en las configuraciones de la matriz, pero todo eso es transitorio. Cuando lleguemos, todo desaparecerá. Tiene que ver con la plasticidad de la distancia y las percepciones cuando delta-t es cero.-
-Sí, bueno, parece que esta clase de cosas no se sabe muy bien aún.-
-Bueno, no hay otro modo para llevar a cabo una experimentación adecuada.-
-Y ¿lo que dijiste de una ‘olla de distorsión espacial’? ¿Qué hay de nuevo?-
-Ola. Es una ola. El proyector comprime el espacio a mi alrededor y a través de la distorsión me puedo mover y ejecutar los saltos cuánticos.-
-¿Cómo de grande es esta distorsión?-
-En realidad me encuentro en una situación de distancia cero, es un umbral. Así que, esencialmente mi parte delantera ya está ahí, mientras que mi parte trasera sigue estando en el punto de partida.-
-Pero nos estamos moviendo alrededor de la Tierra, que ha sido nuestro punto de partida.-
-Bueno… tal vez.-
-Y los animales que cargamos ahora no están aquí, lo cual podría ser un problema…-
-Los animales no experimentan realmente el tiempo de la misma manera que hacemos los humanos o las Naves. De hecho, las Naves también se desenvuelven de una forma diferente con respecto a los humanos. Pero los animales no entienden la idea de ‘ahora’ como tú y yo, no saben distinguir el ‘ahora’ del ‘hasta ahora’ y del ‘después’. Sólo tienen ‘ahora’.-
-Con lo cual la solución es…-
-Bueno, en realidad no hay envejecimiento, así que deberemos simplemente esperar.-
-¿Para siempre?-
-Sí.-
-Yo creo que me volveré loco.-
-Probablemente lo harás.-
-Quiero volver.-
El estrés, dicen, es lo que ocurre cuando el cuerpo se resiste a su deseo natural de una paliza a alguien que realmente se lo merece. Odio el estrés. Renuncio. No puedo pegar a una Nave y dejarla tendida.
-Haces todo tan jodidamente difícil.- Mirando atrás se percató de los cambios que la observación no le había transmitido hasta enyonces. -Esto es lo que realmente va a suceder. Voy a mirar por la ventana y veré el faro de destino. Ahí está. Y eso significa que esa ventana y parte de la nave ya están ‘ahí’.
-Así que me imagino que voy a dibujar una línea que corte en dos la cubierta, y espero un momento para ver realmente que todo en ese otro lado de la línea ya está ‘ahí’.-
-Empiezas a entenderlo.-
-Y ahora, ya que yo sé exactamente donde el espacio se ha coagulado, voy a dar un salto en carrera…-
-Y aquí estamos.-
Los motores de inducción giraron de inmediato y pude ver como el espacio se expandía detrás de nosotros.
Miré entonces a la Nave como sólo un piloto de Naves Vivas puede hacerlo y me aventuré a decirle: -No ha sido tan difícil este primer viaje, ¿verdad?-
-Sólo eres mi piloto, pero ¿sabes qué? Cómo sigas haciéndome tantas preguntas retorcidas y pienses de manera tan rebuscada, de verdad, nunca llegaremos a ninguna parte. ¿Puedo encender mis motores ahora? Aún no hemos empezado la primera clase de conducción.-
¿Por qué tenemos que depender de esos ineptos para poder volar? se preguntó la Nave por sus adentros.